martes, 22 de julio de 2014

Proyecto Mazaryk: más trabajo en equipo y menos defensa de intereses particulares

Maite Ramos Gómez @maiteramosg. Cada vez que me encuentro a uno de los socios de Coparmex Ciudad de México insiste en preguntar:¿Por qué no a las bahías en Mazaryk? 

He respondido con los argumentos que sustentan nuestra posición en la Comisión de Movilidad y de los que estoy plenamente convencida: por que no era la naturaleza original del proyecto, porque es un proyecto integral de movilidad urbana, que tiene como objetivo no solamente el rescate y mejora de un espacio público -que ya en si mismo es muy importante- sino privilegiar al peatón y propiciar un espacio para él; porque con esta infraestructura demuestras que pueden existir los espacios integrales en donde pueden convivir el peatón, la bicicleta y el automóvi, cada uno en su espacio. También hemos dado respuestas más técnicas explicando cómo estas bahías, que en su mayoría serán utilizadas como estacionamiento para vehículos escolta y/o con chofer, no para ascenso y descenso como se dice, afectarán el tráfico de la zona, reducirán uno de los dos carriles de circulación, limitarán a las bicicletas y no contribuirán a generar más ventas, todo lo contrario.


Sin embargo la discusión de fondo va mucho más allá, los argumentos técnicos, sociales y económicos no significan nada cuando en un proyecto de este tipo se suman dos grandes debilidades en la cultura de nuestro país y en la forma de actuar de la mayoría de nuestros gobernantes: la falta del trabajo en equipo y la defensa de intereses personales.

Desde los primeros ejercicios que se hacen en primaria los niños muestran que son mejores en los trabajos individuales que en los trabajos en equipo: siempre hay alguno que termina haciéndolo todo, otro algún poco y otro más solo estorba. El el deporte, salvo la Medalla de Oro en futbol de los Olímpicos pasados,  los logros de nuestros compatriotas han sido en deportes individuales: Ana Gabriela Guevara, Joaquín Capilla, Paola Espinoza, Belem Guerrero, Raúl González entre muchos otros. Nos cuesta trabajar en equipo, en este caso la coordinación entre la Delegación Miguel Hidalgo, SEDUVI y  la Autoridad del Espacio Público (AEP) es otra muestra de ello.

El trabajo que ha hecho la Delegación encabezada por Victor Hugo Romo y su Secretario de Gobierno David Razú ha sido mucho más cercana a la sociedad civil y con el objetivo claro de mejorar la calidad de vida de los habitantes de la zona y de los más de 200 mil visitantes que llegan todos los días a trabajar en ella. En cambio otros como Eduardo Aguilar, titular de AEP, son no solamente distantes, son inaccesibles. No sé cuántas veces se reunan para tratar el tema, pero si sé que lo que la sociedad percibe, lo que yo percibo,  es que no tienen el mismo objetivo, que cada uno jala la cuerda para diferente extremo y  no es un trabajo en equipo.


Esto nos lleva al segundo gran punto: los extremos de la cuerda van a diferentes extremos porque los intereses no son los mismos,  por qué defender a la mayoría que no me deja nada cuando “debo” defender a unos cuantos, intereses personales o minoritarios que garantizan un beneficio político, de respaldo, influencias o recursos.


Sin duda a pesar de la falta de coordinación, de la presencia de intereses e incluso a pesar de todos los involucrados, la renovación de Presidente Mazaryk será un avance en materia de movilidad urbana en la Ciudad, hoy está en manos de las autoridades involucradas decidir qué tan significativo puede llegar a ser este avance y demostrar congruencia con la pirámide presentada en la recién aprobada Ley de Movilidad en donde el peatón es el Centro de toda decisión del Gobierno del Distrito Federal.